Como Afecta el Neuromarketing en los Supermercados 

Te habrás dado cuenta de que casi siempre que entras en un supermercado, te dan ganas de comprar todo. A veces, vas con la intención de comprar solo lo necesario, pero al final terminas con el carrito lleno de productos que no estaban en tu lista. ¿Por qué sucede esto? Resulta que los supermercados utilizan una serie de trucos de neuromarketing para atraernos y hacernos comprar más de lo que realmente necesitamos. ¿Quieres saber cuáles son? ¡Te los contamos!

Qué es el neuromarketing

Primero vamos a ver que es el neuromarketing. El neuromarketing es una forma de estudiar cómo funciona el cerebro de los consumidores cuando compran cosas. Se fija en cómo el cerebro reacciona a los productos, los precios, las promociones, los colores o los olores. Usando herramientas especiales como máquinas de resonancia magnética o electroencefalogramas, los expertos en neuromarketing pueden descubrir qué cosas hacen que la gente quiera comprar más, incluso sin que se den cuenta. Esto ayuda a las empresas a crear anuncios, productos y estrategias de venta que sean más atractivos y persuasivos para los consumidores, con el objetivo de influir en sus decisiones de compra de forma subconsciente.

Una vez definido que es el neuromarketing, pasemos a conocer cuales son las estrategias que utilizan los supermercados a la hora de ir a comprar.

Técnicas de neuromarketing

1. Ubicación de los productos

Uno de los trucos más comunes es la ubicación estratégica de los productos en las tiendas. Por ejemplo, muchos supermercados colocan productos básicos como huevos y pan en la parte final de la tienda, para que tengamos que caminar por todo el establecimiento y pasar por otros productos en el camino. Esto hace que pasemos al lado de una gran variedad de productos y nos tiente a comprar cosas que no teníamos en mente. 

Además, algunos supermercados cambian la ubicación de estos productos de manera regular, lo que nos obliga a dar vueltas de más en busca de lo que necesitamos, lo que resulta en más oportunidades de comprar otros productos.

2. Trucos con precios

Otro truco psicológico que los supermercados utilizan es el uso de precios con terminaciones en 9. Por ejemplo, en lugar de poner un precio redondo de $10,99, ponen $9,99, lo que hace que el producto parezca más barato y atractivo para nosotros como consumidores. También nos ofrecen promociones como ofertas 3×2 o descuentos por la compra de varios artículos, lo que nos lleva a comprar más productos de los que realmente necesitamos para aprovechar la oferta.

3. Productos de la caja

Si alguna vez te has preguntado por qué hay tantos productos cerca de la caja, la respuesta es simple: es otro truco para que compremos más. Los supermercados colocan chicles, dulces y otros artículos básicos con un precio bajo en la zona de la caja, para que compremos de manera impulsiva mientras esperamos en la fila

Además, suelen poner productos dirigidos a los niños, como juguetes o golosinas, para mantenerlos entretenidos y persuadir a los padres a que compren más productos mientras esperan en la fila.

4. Iluminación y música

La iluminación y la música también juegan un papel importante en la estrategia de neuromarketing de los supermercados. Te habrás dado cuenta de que los supermercados suelen ser locales muy luminosos, con pocas o ninguna ventana. Esto se hace a propósito para que perdamos la noción del tiempo y nos quedemos más tiempo en el establecimiento, lo que nos da más oportunidades de comprar más productos.

Además, la música que se reproduce en los supermercados está diseñada para ser relajante y crear un ambiente cómodo, lo que nos hace sentir más a gusto y nos anima a pasar más tiempo en la tienda.

5. Jugando con la altura

La disposición de los productos en los estantes también se realiza de manera estratégica. Los productos más caros o de mayor margen de beneficio suelen colocarse a la altura de nuestros ojos, mientras que los productos más baratos o de menor margen de beneficio se colocan en los estantes más bajos o más altos. Esto nos lleva a elegir los productos que están a la altura de nuestros ojos y a gastar más dinero en el proceso.

También se utilizan colores y diseños de empaque atractivos para captar nuestra atención y estimular nuestro interés en los productos.

6. Productos relacionados juntos

Otra estrategia común es la colocación de productos relacionados o complementarios juntos. Por ejemplo, si compras pasta, es probable que encuentres la salsa de tomate y el queso rallado en la misma sección, lo que nos impulsa a comprar ambos productos juntos aunque los tengamos en casa, porque nuestro cerebro inconscientemente dice “lo compro por si acaso, que no me acuerdo si tengo en casa”.

7. El olor

Los supermercados también suelen utilizar la psicología del olor para atraernos y hacernos comprar más. El olor a pan recién horneado o a café recién molido puede despertar nuestro apetito y tentarnos a comprar estos productos, incluso si no los teníamos en mente al principio.

8. El color

Otra técnica efectiva es el uso de la psicología del color en la señalización y en los empaques de los productos. Por ejemplo, los colores brillantes y llamativos se utilizan para productos destinados a niños, mientras que los colores más sobrios y elegantes se utilizan para productos dirigidos a un público adulto. 

Además, los colores también se utilizan para indicar ofertas o promociones especiales, lo que nos hace sentir que estamos obteniendo un trato especial y nos impulsa a comprar.

Conclusión

En resumen, los supermercados utilizan una amplia variedad de técnicas de neuromarketing para atraernos y hacernos comprar más de lo que necesitamos. Desde la ubicación estratégica de los productos, el uso de precios psicológicos, las promociones tentadoras en la caja, la iluminación y la música, hasta la psicología del olor y del color, todo está diseñado para influenciar nuestras decisiones de compra

Para evitar caer en estas estrategias y gastar de más, es importante que seamos conscientes de ellas y nos mantengamos fieles a nuestras listas de compras y necesidades reales. ¡No te dejes engañar por los trucos de los supermercados y compra de manera consciente!