En cuanto llegó a nuestros oídos lo que tenían en mente, supimos que teníamos que estar con ellos, desde la parte que mejor sabemos hacer, crear identidad de marca.
Después de estudiar el briefing y de un elaborado proceso de análisis y madurez de conceptos, el resultado fue una marca que estará presente durante mucho tiempo en la mente de los granadinos, porque no solamente promoverá una acción aislada, sino muchas de ellas y de forma periódica y mantenida en el tiempo.
Un logotipo que dá la vuelta a la forma de entender y abanderar el nombre de nuestra ciudad. Una forma de trasladar al logo el concepto de que, dando un ligero reenfoque a una situación, se puede transformar (en este caso dando un ligero reenfoque al acento).
Con este branding pretendimos desde el inicio poner énfasis en la importancia de “ofrecer ayuda para que otros puedan acceder a unas condiciones de vida dignas”, tanto si se trata de personas, como del planeta y sus habitantes en general”.
La primera campaña solidaria que promueve esta marca se titula “Soy persona”, y tiene precisamente el objetivo mencionado anteriormente, acabar con las desigualdades entre los jóvenes por su procedencia o nacionalidad.